La Protectora de Bosques del Estado de México (Probosque), precisó que la superficie afectada disminuyó 28 por ciento, al pasar de 8 mil 948 hectáreas en 2017, a 6 mil 376 en 2018, es decir, 2 mil 572 hectáreas menos. De las hectáreas afectadas durante los primeros cuatro meses de este año, el 91.2 por ciento es de arbusto y pastizal, el 7.7 por ciento de renuevo y el 0.9 por ciento arbolado en etapa adulta.
La dependencia señaló que los municipios con mayor número de incendios registrados son: Ocuilan, Valle de Bravo, Donato Guerra, Nicolás Romero e Ixtapaluca. Mencionó que para el combate de incendios forestales, en el Estado de México se trabaja a través del Mando Unificado, que suma esfuerzos, recursos económicos y materiales de dependencias federales, estatales, municipales, de productores forestales, de las ONG y de la ciudadanía en general.
En esta temporada se cuenta con 274 brigadas integradas por 2 mil 921 combatientes; se tienen 27 torres de observación y se cuenta con el apoyo de dos helicópteros de los Servicios Aéreos del Estado de México.
La temporada de incendios en el Estado de México va de enero a junio, por lo que se invita a la población a visitar los bosques con responsabilidad; si encienden fogatas, hacerlo lejos de las zonas arboladas y asegurarse de apagar el fuego con agua y tierra, depositar residuos y colillas de cigarro en contenedores adecuados y evitar el uso de globos de cantoya y pirotecnia cerca de zonas forestales. Para reportar incendios forestales se pone a disposición de la ciudadanía los números telefónicos 01 800 590 17 00 y el 911.