Toluca, México, 6 de noviembre de 2016.
La irritación por el medio ambiente provocó a Miguel Ángel Zayas un nasoangiofibroma,que es un tumor vascular, sin que él lo supiera, el cual creció tan rápido, que el joven de 22 años de edad llegó al Centro Médico “Lic. Adolfo López Mateos” con dificultad para respirar y alimentarse, por lo que especialistas realizaron una cirugía para extraer el quiste y posteriormente una reconstrucción facial y dental, procedimiento que en un hospital privado tendría un costo de 350 mil pesos. Gerardo Guadarrama Álvarez, médico adscrito a cirugía maxilofacial de este centro, explicó que el crecimiento de este pólipo nasal es un caso aislado, pues son tumores benignos poco frecuentes, que provienen de la mucosa nasal y la irritación al medio externo provoca un crecimiento anormal que lo convierte en un nasoangiofibroma.
“A este joven le creció por dentro de la nariz, lo que primeramente le impidió respirar, pero creció tan rápido que le fue invadiendo la garganta y ya tenía dificultad para comer y hablar. Hasta que esta lesión lo llevó a una disminución de las células sanguíneas, lo que provocaba que sangrara frecuentemente”, dijo.
El especialista abundó que la lesión se encontraba en la nasofaringe, lo que complicaba llegar a esa zona y fue necesario que especialistas hicieran un abordaje transfacial, es decir, quitaron todas las estructuras faciales para poder abordar al tumor, por lo que el paciente también perdió piezas dentales.
“Aseguramos la vía aérea para que el joven pudiera respirar de manera adecuada, posteriormente llevamos todo un protocolo en relación al estudio de la lesión y a un procedimiento en la sala de hemodinamia, porque la lesión era altamente vascular, si a ese paciente no se le lleva a ese proceso, hubiera tenido un sangrado importante. Corría muchísimo riesgo de tener una hemorragia durante la cirugía o después de ella”, refirió. Durante la cirugía a Miguel Ángel Zayas participaron especialistas como anestesiólogos, neurocirujanos, oncólogos, maxilofaciales, otorrinolaringólogos y de hemodinamia, que juntos trabajaron para extraer de manera exitosa el tumor y posteriormente reconstruirle la cara al paciente.