Toluca, Estado de México, 24 de marzo de 2020.
La obra “Maternidad”, trabajo del acuarelista mexicano Edgardo Coghlan, quien hizo del Estado de México su casa por más de 20 años, destaca por el empleo de la técnica de los pigmentos diluidos, explicó el Maestro Benito Nogueira Ruiz, Director del Museo de la Acuarela.
También refirió que el pintor vivió por mucho tiempo por el rumbo de Los Volcanes, situación que lo llevó a realizar paisajes.
“El maestro Coghlan se distingue por el paisajismo, pero también por el buen trato de las figuras, sobre todo figuras indígenas. En este caso, “Maternidad” es una mazahua, casi una niña, con un bebé, el tema enternece por la situación misma de ver una niña con su criatura.
“Por otro lado, asombra el manejo tan exquisito del color, son colores muy sobrios, de fuerte contraste con los tonos ocres, sepias y de siena tostada en el fondo. Lo manejó con cierta humedad e intención para darle mayor profundidad y generar más atmósfera”, explicó.
Asimismo, Nogueira resaltó el trabajo de composición de Coghlan, quien buscaba el punto focal con base en varios bocetos de trazos a lápiz en pequeña escala, pero en diferentes posiciones y ángulos, y el mejor de ellos sería en que trabajaría para hacer la acuarela.
“El punto focal lo estudió muy bien a través de los bocetos, enfoca muy bien hacia dónde dirigir la vista del espectador, que es hacia el bebé por los tonos muy claros y también nos hace enfocarnos en la niña que está viendo a su bebé.
“Por eso la tenemos como una pieza relevante de nuestro museo, el manejo de un buen dibujo lo hizo con el personaje en vivo y eso lo hace más auténtico. Se trata de una pintura impresionista, ya que cada pincelada, es sólo una mancha, un efecto de sombra y luz que caracteriza al impresionista, es lo que le da mayor relevancia a su trabajo y que también tiene esa calidad de modernidad en sus trazos y eso es lo que le vale ser valioso y admirado”, apuntó.
La obra fue realizada entre 1991 y 1992 y, considerando que Coghlan falleció en 1995, tanto “Maternidad” como las otras 30 obras que resguarda el Museo de la Acuarela, representa el más alto nivel de madurez del artista.
“Es uno de los acuarelistas a nivel mundial que tiene esa calidad sobresaliente. He visto muchas acuarelas de todo el mundo, de países asiáticos y europeos y no veo este nivel tan especial que posee el maestro Coghlan”, comentó Nogueira.