Toluca, Estado de México, 13 de diciembre de 2019.
Las artesanas y artesanos mexiquenses elaboran piezas con distintas técnicas y materiales que desde hace tiempo se han colocado en el gusto de la gente que aprecia la artesanía para decorar sus espacios durante las fiestas de fin de año.
Desde luego, son famosas las esferas de fino vidrio soplado del Pueblo Mágico de El Oro, también los nacimientos de barro, tanto de tamaño normal como miniatura, realizados con minuciosidad por los artesanos de Metepec, o bien las coloridas piñatas que elaboran en Otumba, Jilotepec y Morelos, así como en el Pueblo con Encanto de Acolman, sitio que se identifica por ser la cuna en México de esta bella artesanía y de la tradición que la acompaña.
Pero existen muchas otras piezas de calidad que se producen en distintos puntos del Estado de México, las cuales destacan por su originalidad, diseño y cuidada manufactura.
Es el caso de los nacimientos tallados en hueso y cuerno que ejecutan artesanos del municipio de San Antonio la Isla, los caminos de mesa, cojines, colchas y carpetas de lana, decorados con bordados mazahuas, que realizan las artesanas de la localidad de El Fresno Nichí, en San Felipe del Progreso, y en Mina Vieja, municipio de Villa Victoria.
En Cacalomacán, localidad que pertenece a Toluca, los artesanos producen atractivas piñatas de hoja de lata, adornadas con flores y figuras alusivas a la Navidad, en las que se puede ver la paciencia y el cariño que sus creadores le dedican a cada una de ellas.
Mientras que, en San Felipe Santiago, Villa de Allende, bordan finos nacimientos sobre manta de algodón para diferentes artículos decorativos de la época navideña.
Por otra parte, para muchos resultan familiares los venados y trineos hechos con vara de perilla, que es posible encontrar en distintos puntos del estado, y del país, los cuales son originarios de Ocoyoacac, o bien, de los municipios de Ozumba, Atlautla y Ecatzingo, al pie de Los Volcanes, en la región oriente del Estado de México.
Por supuesto, la lista estaría incompleta, si no se mencionan las esferas, campanas, pinos y ángeles que elaboran, con popote de trigo, las artesanas de la comunidad de Pueblo Nuevo, en Acambay, o sus pares de San Pedro Rosal, en Atlacomulco.
Éstos son algunos ejemplos de la gran tradición artesanal que existe en la entidad en torno a las fiestas de Navidad y Año Nuevo, que se expresa a través de innumerables productos realizados con gran dedicación y esmero por manos mexiquenses.