• Asegura Samantha Romero que el rescate de este espacio público ayuda a su comunidad y complementa su entrenamiento como boxeadora profesional.
• Es un lugar para toda la familia, comenta Ian Francisco, aspirante a Director Técnico de futbol, al señalar que en el parque ha visto hasta 50 niños jugando en las tardes.
• Observa Erik X. Rodríguez, entrenador de Calistenia, beneficios en la economía y la salud de su comunidad.
Atizapán de Zaragoza, Estado de México, 19 de febrero de 2023. La reciente apertura del Parque Recreativo Atizapán de Zaragoza ha hecho que la comunidad se apropie de sus áreas para la convivencia, la activación física y la diversión de los niños, además permite a varios deportistas del lugar reforzar sus entrenamientos.
Apenas el pasado diciembre el Gobierno del Estado de México, a través de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obra, entregó este Parque que forma parte de la red de 80 espacios públicos rescatados con la estrategia “Vive tu Comunidad” y ahora la concurrencia de los vecinos, que se caracterizan por ser solidarios, ha formado grupos de activación sin siquiera conocerse.
“El chiste es que empiece uno, empezando uno y que vean que una persona está haciendo ejercicio en estos aparatos, empiezan a llegar más y empiezan a llegar más y se empieza a hacer un grupito bueno, buena amistad.
“Puedes convivir hasta con los vecinos, que a lo mejor no sabías que vivían aquí mismo: ‘Ah mira, yo soy el de acá arriba’. `Yo soy el carnicero que vengo temprano a correr, a hacer ejercicio’, entonces empiezas a conocer más a tu comunidad”, asegura Erik X. Rodríguez, un abogado que también es instructor de Calistenia.
En cuanto se abren estos espacios públicos verdes, comienzan a llegar niñas y niños que antes jugaban en la calle, lo que sorprende y emociona a Ian Francisco Tovar, un joven que aspira a ser Director Técnico de futbol y por eso ya se prepara en la Federación Mexicana de esta disciplina deportiva.
“Sí nos va a ayudar porque en verdad no teníamos en cuenta que había tantos niños aquí, antes veías tres, cuatro, así los llegabas a ver y caminando en la calle, ahorita ya que se juntan aquí los niños, llegas a ver hasta 50 niños, aquí, entonces sí, da gusto eso”, expresó.
Tener infraestructura pública para ejercitarse, un lugar con áreas para caminar o correr, con jardines y bien iluminado, mejora a la comunidad y apoya en la preparación de deportistas como Samantha Romero, una boxeadora con 90 peleas amateur y tres profesionales, que también ejerce como Contadora Pública y tiene una Maestría en Impuestos.
“Como comunidad nos ha ayudado mucho y como deportistas creo que nos ha facilitado más poder tener una buena preparación. Áreas más verdes, yo creo que se adaptó para todas las edades, porque viene la gente grande, luego están los jóvenes, pusieron algunos juegos para los niños, está el área del gimnasio”, dijo.
Los tres jóvenes deportistas, originarios de Atizapán de Zaragoza, que han visto y vivido la transformación de este espacio, saben la importancia del antes y el ahora del Parque y de los beneficios para su comunidad.
“Antes era un lugar feo, donde se juntaba la bolita de teporochos de la colonia, asaltaban a la gente. Se abren muchas puertas, lógicamente al tener un espacio que llegue gente, se abre el camino a que la tiendita de la esquina tenga más ventas, abre economía, abre espacios, abre salud, es magnífico, yo creo que es lo mejor que puede hacer un gobierno”, opinó Erik, quien disfruta de este parque con sus dos hijas.
“Era mucha tierra, piedras, había personas que no hacían cosas buenas y sí varios vecinos sí sufrieron. Ahorita que ya se remodeló y todo, la verdad hasta da gusto. Yo creo que es para toda la familia, en las noches, en las tardes, están los niños, están los papás, y en las mañanas los abuelitos vienen y caminan”, comenta Ian Francisco, quien acude con su papá a pelotear un rato.
“Conocí el lugar anteriormente cuando estaba sin arreglarse, sin luz eléctrica, sin las áreas verdes que ahorita conocemos, con los típicos chicos con los vicios que se encontraban aquí. Nosotros venimos a las cinco a correr y a las cinco, por ejemplo, se ve oscuro, ya ahorita está la iluminación, ya se ve la diferencia de un antes y un ahora”, cuenta Samantha, quien de camino a su trabajo, pasa al parque a despedirse de su padre, un entrenador de boxeo que hace sudar a quien se suma a su grupo de entrenamiento.